La bronca explotó y no era para menos, porque cuando Oriente conseguía mucho habiendo hecho poco, cuando sufría lo indecible metido en su arco defendiendo un 2-1, quizá hasta mentiroso, apareció la pierna derecha de Luis Torrico para desviar la pelota antes de que llegara Hugo Suárez y decretar así el 2-2 con el que acabó el duelo anoche en el Tahuichi. Celebración eufórica de los potosinos y bronca total en los albiverdes, que ahora tienen el resuello de Bolívar en el cuello porque la diferencia es tan solo de un punto (26 contra 25).
Los albiverdes, dirigidos por Ariel Cuffaro Russo, jugaron su peor partido en lo que va del campeonato. No hubo actitud (la reclamó el meta Michael Etulain sobre el final del primer tiempo), ni tampoco la dinámica que tenía asombrados a sus hinchas hasta la primera rueda. Esta vez no hubo el pretexto de que la visita vino a meterse atrás como sucedió frente a Universitario (0-0).
Oriente careció de juego en conjunto, de alternativas sólidas para vulnerar la valla contraria. Es más, entró en ‘shock’ cuando Víctor Hugo Angola marcó a los 23’ el 1-0 parcial definiendo bien ante la salida de Etulain.
La pelota la había perdido Fernando Saucedo, que en su intento por tenerla más de lo debido se la dejó quitar por Sebastián Carrizo, que luego habilitó a su compañero. Hasta ahí, el local solo había inquietado con una llegada por derecha de Alcides Peña y otra arremetida de Joselito Vaca.
Con Real Potosí agrandado, siendo sólido en el medio, con Eduardo Ortiz, Carrizo y Mario Ovando, el equipo mantenía en línea a su rival, que se desesperaba. Los albiverdes, presionados por la mala entrega de Fernando Saucedo y la poca participación de Campos y Mauricio Saucedo, intentaron rematar de lejos o simplemente acabaron perdiendo la pelota en campo rival.
Marcelo Aguirre intentó en varias ocasiones hacer la ‘heroica’ y más bien acabó abucheado. Sin penetración por los laterales (Alejandro Meleán y Gabriel Aguilar lucieron bajos), el equipo sufría y en medio de un descontol por los nervios y la presión, se fue perdido al descanso. Mucha culpa para que esto suceda tuvieron Miguel Loayza, Víctor Hugo Angola y Gerardo Yecerotte, este último un dolor de cabeza para Caamaño y Schiapparelli. En el complemento Cuffaro Russo movió el tablero, ya que puso a cubrir a F. Saucedo el carril izquierdo para dejar a Meleán como hombre de marca y permitir la subida de Aguirre. Siendo impreciso, Oriente logró el empate en una jugada en el área chica del meta Henry Lapczik, ya que tras una confusión total, Caamaño logró conectar (64’) poniendo el 1-1.
El gol despertó el entusiasmo no solo de los hinchas, sino también del equipo. Fueron cinco minutos de plena actitud porque dos minutos después, Joselito Vaca recibió un pase de Alcides Peña y, avanzando unos metros, remató cruzado poniendo el 2-1 parcial y desatando una euforia impensada en el Tahuichi por lo que había hecho el equipo. En ese momento dio la impresión de que el local crecía, de que se le iba encima, es más, era su oportunidad; sin embargo, pronto vino la expulsión de Fernando Saucedo por una falta injustificada muy lejos del arco y el equipo volvió a venirse abajo. Ya estaban en cancha Hugo Suárez y el ‘Chapa’ Fernández (Etulain fue sustituido por un tema de extranjeros) y con ambos el equipo ganó en actitud.
Wálter Veizaga, que había remplazado a Jhasmani Campos, pasó a cubrir el carril derecho y no lo hizo mal, pero Oriente ya estaba metido. Yecerotte pudo haber igualado en un par de ocasiones, pero la pelota no entraba. Pero a los 94’, vino un tiro de esquina, lo cabeceó el meta Lapczik, lo complementó Centurión y desde atrás entró Torrico para colocar el 2-2. Euforia potosina y bronca albiverde. Hubiera sido injusta una victoria local.
Lo que viene
21 de abril
The Strongest - Oriente
24 de abril
Oriente - Blooming
1 de mayo
San José - Oriente
8 de mayo
Oriente - Aurora
12 de mayo
Universitario - Oriente
15 de mayo
Oriente - Nacional Potosí
19 de mayo
Bolívar - Oriente
22 de mayo
Oriente - Guabirá
29 de mayo
Oriente - Real Mamoré
Además
- Los árbitros se fueron tarde. Los cuatro árbitros designados para el partido en el Tahuichi tuvieron que esperar una hora para poder retirarse, porque varios hinchas orientistas esperaban fuera. La Policía los custodió durante el tiempo que estuvieron en el escenario.
- Tristeza total. Los dirigentes de Oriente se tragaron la bronca por el segundo partido que el equipo albiverde no puede ganar en el Tahuichi. El presidente, Miguel Ángel Antelo, se fue del estadio 20 minutos después del pitazo final.
- Vuelven Gutiérrez y Hoyos. Frente a The Strongest, Oriente podrá contar con Miguel Hoyos y Luis Gutiérrez, que cumplieron su sanción. Juan Carlos Arce tiene dos fechas más.
El hincha bajó el pulgar
El partido acabó tras la jugada que decretó el empate potosino. Los jugadores de Oriente, impotentes por la situación, intentaron descargar toda su bronca contra el árbitro capitalino José Jordán. Rodearon al juez, mientras sus líneas Samuel Chuca y Ángel Flores pedían desesperados protección policial ya que los uniformados estaban abocados en detener a Gerardo Yecerotte, que había escupido a un uniformado.
El público silbaba y luego de que llegara la Policía, a los albiverdes no les quedó otra que emprender, cabizbajos, camino rumbo al camerino. Como pocas veces se ha dado en este campeonato, los hinchas comenzaron a recriminarlos. Es más, provocaron la reacción de Mauricio Saucedo, que respondió con un ademán con la mano izquierda como diciendo que les importaba los insultos que venían.
Jhasmani Campos se quedó un rato en el piso y después de unos minutos, uno a uno fueron ingresando al camerino, en fila india. “El primer córner no era, ahí se equivocó el juez, por eso es la rabia”, dijo Hugo Suárez, uno de los pocos jugadores que se animaron a hablar con los medios. De la tribuna seguían bajando los insultos centrados sobre todo en Fernando Saucedo y en Gabriel Aguilar, que tuvieron una jornada para el olvido.
Cuffaro Russo no vertió opinión, se escurrió rápido en medio de la trifulca en el camerino potosino y en el medio de la cancha con los árbitros, aunque fue evidente su mal humor por lo que había pasado en cancha. La bronca también llegó al ‘Conejo’ Arce, que tras insultar al árbitro frente a La Paz F.C. en la fecha pasada, se perderá los próximos tres partidos, incluido el clásico cruceño del domingo en el estadio Tahuichi Aguilera.
La sensación de la afición no era buena, no solo por el resultado de ayer, si no porque el miércoles deben visitar a The Strongest en el Hernando Siles y después medirse con la academia cruceña en un partido siempre complicado. De los nueve partidos que aún restan por el torneo Adecuación, Oriente debe jugar cinco en casa y cuatro fuera, aunque ahora no solo se centrará en lo que haga, sino que mirará de reojo la campaña que cumpla Bolívar.
“No me gusta hablar para los árbitros, pero lo que pasó acá, fue algo desastroso. El juez nos perjudicó bastante”, se quejó Gustavo Caamaño impotente tras el 2-2 final frente a los potosinos. Oriente se fue mascullando bronca, porque el empate tuvo sabor a derrota. Muchos se preguntaban las causas del bajón ya que el equipo venía de golear a Gremio por la Libertadores.
Yecerotte, contra la Policía
El gol de Real Potosí pudo traer graves consecuencias, luego del enfrentamiento entre el delantero Gerardo Yecerotte y la Policía, que para suerte del jugador no llegó a mayores porque varios esperaban que sea detenido por faltar el respeto a la autoridad.
Tras anotar el empate (2-2), por medio de Torrico, el banco de suplentes explotó de alegría. De allí salió Yecerotte, que minutos antes había sido remplazado. El delantero comenzó a hacer gestos obscenos a la tribuna, que enfurecida comenzó a lanzar objetos al campo de juego.
Antes de ingresar a la casamata, Yecerotte reclamó a la Policía porque una persona supuestamente estaba tratando de llevarse una conservadora con agua, pero un efectivo le dijo que se tranquilizara y se sentara, en eso el jugador escupió al policía, que reaccionó golpeándolo.
Yecerotte empujó al efectivo, que recibió al instante el apoyo de sus colegas, que arremetieron contra el delantero de Real Potosí, que trató de levantar las manos y dar la espalda para evitar más reacción.
Para suerte del futbolista del equipo lila, los ánimos se calmaron por parte de los efectivos policiales, que tuvieron que ‘olvidarse’ del tema porque el partido había terminado y se fueron a custodiar al árbitro José Jordán, que estaba siendo asediado por los jugadores de Oriente que reclamaban su actuación.
La figura
Miguel Loayza
Equipo: Real Potosí (volante)
Otra vez el pequeño jugador demostró su gran nivel. Fue el generador del juego de los potosinos y fue difícil de marcar para los defensores de Oriente.
Las frases
“No me gusta hablar de los árbitros, pero en esta ocasión fue una actuación demasiado mala. Nos perjudicó”
G. Caamaño - Oriente
“Por lo que hicimos el empate es justo. No es fácil meter a Oriente en su arco y nosotros lo logramos”
Miguel Loayza - Real Potosí
El ojo crítico
Caído del cielo
Luis Torrico / Lateral
Anotó el gol del empate al final
El defensor apareció en el último minuto de adición para empatar un encuentro que se les escapaba de las manos, tras estar ganado por 1-0. Torrico aprovechó una desconcentración de la última línea de Oriente y con ello selló un resultado justo por lo que hizo el conjunto lila (2-2).
El duro
Alejandro Schiapparelli / Zaguero
Marcó fuerte, aunque muchas veces pegó
Tuvo algunos inconvenientes para detener a Gerardo Yecerotte y a Víctor Hugo Angola, por lo que además de ir fuerte a la marca también pegó demasiado. El zaguero central de Oriente Petrolero jugó al filo porque fue amonestado en los descuento de la primera parte.
Premio limón
Fernando Saucedo / Volante
Mal partido y de paso fue expulsado
El volante de Oriente jugó su peor partido en lo que va de año. Fue el causante del primer gol de Real Potosí tras perder el balón en el medio ante Carrizo, que cedió el pase a Angola, que anotó. Luego Saucedo se hizo expulsar en la segunda parte y perjudicó a su equipo, pues iba ganado 2-1.
La síntesis
Jueces
Árbitro:José Jordán (Sucre)
Líneas: Samuel Chuca y Ángel Flores