miércoles, 29 de enero de 2014

La chance se hace latente...


Libertadores. Un gol de Gualberto Mojica en la primera parte del duelo dio a Oriente Petrolero una merecida victoria en el Tahuichi en el choque de ida ante Nacional, de Uruguay. La revancha será el 4 de febrero; hay ilusión por avanzar
M. Cambará - R. Callaú - El Deber
 Oriente Petrolero comenzó a lo grande en esta edición de la Copa Libertadores de América. La victoria de ayer por 1-0 sobre Nacional de Uruguay en el Tahuichi fue merecida, la buscó desde el inicio y la encontró producto de una entrega que hacía tiempo no se le veía. El golazo de Gualberto Mojica tras gran habilitación del español Juan Quero fue el corolario de un partido redondo en el que el local demostró sus ambiciones pese a los quilates del rival.
El triunfo tuvo pilares clave entre los que sobresale la firmeza de Ronald Raldes y el coraje de Yasmani Duk, con quienes se complementó muy bien Mojica, con su tranco largo y su capacidad para definir, que permitieron al equipo de Tabaré Silva ilusionarse. La revancha está marcada para el martes 4 de febrero en Montevideo. Lo de Nacional fue pobre, es más, de no haber sido por el arquero Gustavo Munúa la diferencia pudo ser mayor.
En el partido, salió Oriente airoso en esa etapa inicial en la que fue dueño de la pelota, con presión y salida rápida, con aplomo en la última línea con un Ronald Raldes impecable y con Yasmani Duk a puro coraje para apretar en ofensiva. Eso sí, lo mejor del equipo local en esa etapa estuvo por izquierda, donde Marvin Bejarano fue un aluvión y donde Mojica y Juan Quero encontraron una sociedad que no soltaron.
El local pudo haberse puesto en ventaja a los 13’ a través de Duk, que logró arrebatarle el balón tras un resbalón de De los Santos, pero en el mano a mano con el meta Gustavo Munúa, el boliviano perdió. El público desde ese instante creyó que se podía y contagió de ese optimismo al plantel. Las arremetidas charrúas se resumieron solo en esporádicos remates de Gonzalo Ramos tras faltas cerca de Arias.
Oriente había hecho méritos y a los 32’ el estadio explotó. Tras una salida limpia desde atrás de Raldes para Zabala, este habilitó a Duk, cuyo remate cruzado acabó por la izquierda. Pero la pelota no se fue, la tomó Quero y el pequeño volante español tras sacarse al lateral Pablo Álvarez, metió la pelota al centro y vino el zapatazo cruzado de Gualberto Mojica. Golazo para el 1-0 y celebración eufórica de los hinchas.
Esa dinámica acompañada del pleno desgaste físico del equipo siguió cuando Quero (40’) volvió a penetrar por izquierda, pero esta vez su centro al corazón del área encontró a Duk muy recostado por derecha. Oriente finalizaba una primera parte a tope, sin mezquinar la pierna y sacando fuerzas de donde no había. Pero faltaba el complemento y el técnico Silva sabía que no iba a ser fácil por el despliegue hecho.
Control y aguante
Oriente quiso más apenas se reinició el juego; había que explotar al máximo las energías que aún quedaban. El ‘Gato’ Zabala por derecha fue un puñal para los uruguayos y a los 49’ le metió un espectacular balón cruzado para Mojica que solo frente al portero Munúa, le pegó de lleno pero el arquero logró tapar. Esa jugada anunció a Nacional que no se iban a meter atrás, que el objetivo era buscar el segundo de entrada.
Gerardo Pelusso, el técnico de la visita, ya había mandado a la cancha a Cruzado y Pereiros, dos hombres desequilibrantes y de buen porte físico, pero atrás el capitán Raldes era una muralla y se complementó muy bien con Mariano Brau que no desentonó. Aparte, cada vez que Carlos Arias fue exigido, respondió con la solvencia que siempre tuvo.
Después del primer cuarto de hora, Nacional adelantó líneas, más que por mérito propio fue por el desgaste físico de jugadores clave como Duk, Zabala y Meleán. El técnico intentó mantener el ritmo con la inclusión de Rodrigo Vargas por el ‘Gato’ y de Fernando Saucedo por Duk, esto le permitió una salida limpia a Scotti y De los Santos ya que Yasmani los tuvo a mal traer.
Poco antes, a los 61’ y 62’, Alonso avisó con jugadas de riesgo, una de cabeza y otra con un remate cruzado que puso los pelos de punta a los miles de hinchas apostados en las gradas del Tahuichi. Era evidente que el bajón físico se sentía pero había que intentar. Y Vargas mostró el camino (64’) en un arranque por izquierda y tras buena combinación con Marvin Bejarano por poco termina en gol luego de un centro que encontró a Duk mal parado.
El público intentó empujar con aplausos y gritos de aliento pero el desgaste era evidente. Nacional tuvo un par de opciones más en las que Alonso fue el protagonista, pero Raldes o Brau aparecieron a tiempo para cerrarlo. De ahí hasta el final fue solo aguantar, porque durante gran parte de esa etapa fue de la visita, aunque sin la precisión ni la convicción que se esperaba.
Al final fue victoria albiverde, corta en el resultado, pero alentadora para la parcialidad que hoy se ilusiona con avanzar a la siguiente fase. Si lo hace ingresará a la fase de grupos donde ya están Newell’s Old Boys, Gremio y Atlético Nacional. La ilusión está viva 
RALDES IMPUSO SU CLASE Y EXPERIENCIA

 No por nada Ronald Raldes es el capitán de la selección y no por nada el técnico Tabaré Silva le confió anoche el cintillo que en el torneo anterior era de Miguel Hoyos. Raldes demostró su vigencia y su experiencia para dar seguridad a la defensa, con salidas claras desde el fondo y en la marcación cuerpo a cuerpo prácticamente fue una barrera.
No está en la plenitud de sus condiciones físicas pero aún así fue una de las figuras consulares del partido. “La verdad es que todos aportamos, el equipo estuvo muy bien”, declaró el número 16 del equipo refinero.
Mantiene intacta esa calidad que lo llevó por varios países. Oriente confió en sus condiciones técnicas y anoche el hincha lo premió con aplausos en cada una de sus intervenciones.
Raldes no solo cumplió en la marca y en la salida, sino que le dio firmeza y fue el caudillo que Oriente buscaba. Desde el fondo el ex-Rosario Central y Colón, entre otros equipos, demostró que el que sabe, sabe.
LOS TÉCNICOS
“Muy satisfecho porque tuve un equipo muy solidario. Salió todo, y quizás se pudo haber concretado algunos goles más”
Tabaré Silva - Oriente Petrolero
“Fue un justo resultado. No puede ser que juguemos dos tiempos diferentes. En el primer tiempo dimos muchas ventajas”
Gerardo Pelusso - Nacional

lunes, 27 de enero de 2014

Se cayo sin excusas

Equipo B para ir a la Villa Imperial a jugar contra Nacional Potosí, y al final, derrota, quizá previsible por la prioridad que hoy tiene Oriente Petrolero, que el martes recibe a Nacional de Uruguay en su debut en la Copa Libertadores. Los ‘Rancho guitarras’, dirigidos por Mario Rolando Ortega, hicieron lo justo, se encontraron ante un timorato rival y lo liquidaron (3-1) gracias sobre todo a la eficacia de su atacante Bryan Aldave.

El duelo en principio estaba marcado para las 15:30, pero un bloqueo en el trayecto Sucre-Potosí, obligó a que el partido se retrasara por una hora. Oriente, que volvió a lucir su uniforme amarillo con la cruz verde en el pecho, poco hizo para complicar a su rival, más allá de los remates de larga distancia que ensayaron Fernando Saucedo y Diego Rodríguez, que en ofensiva fue el más movedizo. Élder Cuéllar lució bajo producto de la falta de volumen de juego del equipo.

Además de Aldave, que se erigió en la figura del duelo, vale la pena destacar en Nacional Potosí el despliegue de Rodrigo Vargas (Oriente también tiene un Rodrigo Vargas, pero estaba expulsado), que por derecha fue una vía de escape rápida para el local, sobre todo cuando la visita se metió atrás. De sus pies nacieron las principales jugadas de gol. Cerró su buena tarde marcando el tercero en complicidad con el meta Álex Arancibia al que se le escurrió el remate de derecha.

En la primera parte el local se fue con ventaja luego de que el atacante Bryan Aldave marcara el 1-0 de cabeza (13’) tras un tiro de esquina ejecutado por Edson Zenteno. Hasta ese instante Oriente no era menos, es más, se había animado a inquietar al meta Arístides Florentín, con remates desde lejos de Rubén Carballo y Fernando Saucedo, pero en ambas ocasiones el meta logró desviar con gran agilidad.

La propuesta albiverde era clara, esperar con tranquilidad, recuperar y salir rápido. Era importante mantener las reservas físicas y fue por eso que se optó por remates desde lejos. En ofensiva, quizá les faltó mayor serenidad a Élder Cuéllar y a Diego Rodríguez, ya que cedieron mal pelotas que pudieron tener mayor riesgo. Tras el gol, Nacional Potosí fue más, utilizando sobre todo el juego aéreo gracias a las buenas habilitaciones de Zenteno.

Pudo aumentar sin inconvenientes a los 23’ a través de Fernando Marteli, pero el defensor remató mal perdiendo el mano a mano con Álex Arancibia, dejando escapar una inmejorable opción. Las dos siguientes fueron de Aldave, la primera con remate frontal tras centro desde la derecha de Vargas (32’) y la segunda luego de un remate cruzado (45’) que obligó al esfuerzo de Arancibia. Oriente intentó responder con Saucedo (37’) pero sus remates acabaron siendo controlados.

En el complemento
En procura de igualar el marcador el técnico Tabaré Silva optó por mover el tablero incluyendo a Carlos Áñez y poco después a Yussein Monasterio. Las variantes dieron a Oriente solo aire, porque el desequilibrio fue poco. Encima, a los 66’ Aldave volvió a marcar (2-0) cabeceando entre Monasterio y Rony Montero otro centro de Rodrigo Vargas.
 

Pese al golpe, Oriente logró descontar luego de que el árbitro José Jordán le regalara un penal tras el remate de Diego Rodríguez que dio en el pecho de Wálter Rioja. Saucedo lo cambió por gol (70’). Pero esa inyección de ánimo duró poco porque sobre el final (92’) Vargas puso el definitivo 3-1. Indiscutiblemente Nacional Potosí fue mejor

lunes, 20 de enero de 2014

Primer Partido 19-01-14 Oriente 3 Guabira 2 en Montero


Emoción. Oriente ganaba por 2-0 y a los 90’ Guabirá logró empatarlo. Lo que nadie se imaginó fue que Yasmani Duk se disfrazara de héroe al marcar el 2-3 definitivo en el descuento. Los albiverdes comenzaron como querían

Cuando la Caldera que había hervido toda la tarde ya respiraba tranquilidad tras el empate parcial de Diego Cabrera, a los 90’, Yasmani Duk apareció sorpresivamente para poner el 2-3 definitivo y ratificar que Oriente se quedaba con los puntos en la primera fecha del Clausura. El goleador albiverde, que sorpresivamente comenzó sentado, ingresó después y acabó siendo el héroe.
La expectativa era grande para ver al nuevo Oriente, el uruguayo Tabaré Silva, y a Guabirá del mexicano David de la Torre, que venía de dejar buena impresión en el Apertura. Los dos equipos tuvieron altas y bajas, aunque al final pesó la camiseta albiverde (ayer fue amarilla y verde) por el decisivo gol en el epílogo.
Los azucareros comenzaron bien el encuentro, presionando y desbordando por la derecha, donde Pablo Zeballos inquietó varias veces a los defensores visitantes, aunque le faltó profundidad. En el medio, Matías García fue dinámico, igual que Darwin Ríos y que José Alfredo Castillo.
Oriente recién a los 7’ tuvo una aproximación por intermedio de Rodrigo Vargas, que volvió a ser titular después de mucho tiempo; sin embargo, la visita mostraba poco,  es que Alejandro Meleán y Gualberto Mojica todavía no se asentaban, es más, el polifuncional volante no jugaba un partido oficial desde junio de 2013.
Por su lado, el español Juan Quero recién hilvanó una jugada clara a los 10 minutos, pero perdió dos veces en pelotas divididas debido a su tamaño (mide 1,60 m de estatura). De todas formas no se amilanó y comenzó a ser más activo, sobre todo al momento de crear; fue elevando su juego de a poco.
Después del cuarto de hora Meleán mejoró en la recuperación y Mojica se mostró más lúcido en visión de juego, aprovechando que al mismo tiempo en Guabirá García se perdía, y Castillo y Ríos deambulaban.
Hubo un momento en que el partido cayó en un pozo, pero a los 21’ apareció la visión de Mojica, que tras recibir un balón que sobró en el medio cedió un pase perfecto por arriba para Alcides Peña, que estando solo venció a Elduayén levantándole el esférico (globito). Tras el 1-0, y ante el júbilo de sus hinchas, Guabirá no reaccionó y Oriente controlaba un partido técnicamente malo. 
Antes de ir al descanso, Rodrigo Vargas se fue expulsado por agredir en la cara a Juan Pablo Rioja. La chance era para el local.
Tiempo emocionante
Con un hombre menos, Tabaré Silva no hizo variantes, pues solo retrasó sus líneas y mantuvo como único punta a Peña.
Guabirá no mejoraba y era porque García no aparecía y porque Didí Torrico perdía demasiados balones en la mitad de la cancha. Oriente controlaba el encuentro y buscaba la contra.
A los 61’ Oriente volvió a sorprender luego de que Zabala habilitó con un pase a Mojica, que de primera envió el balón por arriba nuevamente para Peña, que volvió a ganar las espaldas y colocó el balón a un costado de Elduayen. Fue el 2-0 parcial.
Pero nadie imaginó que a solo instantes Guabirá, que ya tenía a Pedro Siles en la cancha, tuvo el descuento por intermedio de Castillo, que cabeceó un centro desde la derecha de Zeballos. El ‘Negro’ colocó el balón a un costado de Arias (63’).
Más que fútbol, Guabirá propuso entusiasmo porque el descuento despertó a los hinchas que pedían el empate. Al minuto del 2-1, ingresó Diego Cabrera por Darwin Ríos y sí que complicó a la última línea albiverde.
El DT de Oriente decidió meter a Yasmani Duk por Peña (67’). El partido se abrió, pues el goleador dio más que hacer a los rojos que estaban volcados al ataque posibilitado, además, porque Quero y Mojica habían sido cambiados.
A los 90’ Cabrera puso su sello de cabeza, tras un centro de García. ‘Manacha’ ganó las espaldas de los defensores y conectó el balón a la izquierda de Arias. Fue el 2-2. Pero la algarabía en la Caldera duró solo segundos, pues Duk recibió un pase, y luego de llevar el balón con el hombro, se acomodó y lo colocó a la izquierda del meta. Los albiverdes se derrumbaron de delirio porque no quedó tiempo para más. Lo más emocionante estuvo en el final
REFUERZOS APROBARON EL PRIMER EXAMEN


 Buena nota para los refuerzos en Oriente y también en Guabirá. Alejandro Meleán, Gualberto Mojica y Juan Quero se estrenaron como albiverdes y Diego Cabrera como el único azucarero.
Meleán fue de menos a más, pues comenzó lento e impreciso, pero en poco minutos se asentó, aunque se nota que le falta mejorar su estado físico, pues no jugaba desde junio del año pasado.
De la misma manera Mojica comenzó impreciso y lento, pero marcó la diferencia con la presión en la zona ofensiva. De sus pies salieron los dos goles de Alcides Peña. En el segundo tiempo el DT lo remplazo, pues el volante ofensivo ya estaba agotado.
Quero comenzó perdido, pero poco a poco mostró su importancia en el juego rápido a un toque y con precisión en los pases entrelíneas.
Por el lado de Guabirá, Cabrera es el único refuerzo para este torneo. El delantero, que viene de jugar en el fútbol de Colombia mostró su experiencia para aguantar el balón y para arrastrar marca. Ayer dejó en claro que sigue vigente, tras anotar el gol que daba el empate 2-2, tras un cabezazo imposible para Arias. Eso sí, le falta en lo físico.